NUEVOS MATERIALES PARA EL TAPÓN DEL VINO (II): El tapón sintético
Los primeros tapones sintéticos se empezaron a utilizar a principios del siglo XXI. Estos tapones en la actualidad, llegan a tener diseños de gran precisión: los tapones sintéticos de última generación permiten pasar una cantidad de oxigeno al año, según estime el enólogo en su diseño del vino.
Se usan tanto para vinos de guarda, -en España también llamados de crianza- como vinos jóvenes, pensados para consumirse en un rango relativamente corto de tiempo tras su embotellados.
Claro que, por supuesto, no verás vinos de 40 años con tapones sintéticos, pero sí que los puedes encontrar en vinos con diez años.
A la hora de comercializar el vino, el material que se use para tapar la botella de trasciende lo técnico –independientemente de que el vino sea para exportación o para comercio interior. Aunque el material empleado puede ser corcho o cualquier otro –vidrio, aluminio, polímero…. su selección, en la mayoría de los casos, es una cuestión cultural.
Así en lugares como Londres o Suiza, por ejemplo, está totalmente extendido el consumo de botellas de vino con tapones a rosca. En estos mercados este tipo de tapones son muy apreciados en restauración porque facilitan el trabajo de los camareros.
Sin embargo, ha sido la irrupción del tapón sintético lo que más ha impactado a la industria del corcho que ha visto como su demanda ha disminuido notablemente.